- Formar integralmente para asumir la transformación permanente del ser humano y su influencia en los cambios del contexto de acuerdo con los principios del humanismo cristiano.
- Formar de manera efectiva en la resolución de problemas desde una actitud dialógica con base en su saber específico y desde el reconocimiento del otro y del entorno.
- Analizar y proponer alternativas que den respuesta a problemáticas específicas, con base en el trabajo en equipo y en la construcción de estrategias de seguimiento que facilite orientar mejores acciones hacia el logro de las metas institucionales.
- Asumir la racionalidad argumentada como aquella que permite la interacción consigo mismo, con los otros y con lo otro, para construir la propia libertad y posibilitar la de los demás, en contextos formativos y educativos.
- Comprometerse con la formación y el aprendizaje permanente (Lifelong learning), en el horizonte de la autodeterminación, en el asumir la responsabilidad social como educador, en relación con el ámbito de desempeño profesional.
- Trabajar desde la relación todo-parte para visualizar oportunidades y dificultades en perspectiva, y tomar decisiones con base en los logros orientados al trabajo en equipo.
- Hacer uso de la imaginación y el pensamiento crítico para experimentar-producir obras auto-expresivas formativas y académicas de manera contextualizada, y crear así, conocimientos a partir de la investigación.
- Potenciar capacidades para actuar:
• Formar para conocer y comprender.
• Formar para encontrar soluciones eficaces a los problemas humanos.
• Formar para actuar con sensibilidad y agudeza mental como ciudadano del mundo.
• Formar para actuar como un participante inteligente, como profesional.